El alavés del Movistar Team, Mikel Landa, ha ganado la segunda etapa de la Settimana Internacional Coppi e Bartali (ITA/2.1).

En la general el liderato sigue siendo para el Mitchelton Scott, ahora con otro joven corredor, Lucas Hamilton, de 23 años, al que Landa ha superado en el sprint final a dos por la victoria.

Landa es ahora cuarto en la general a 22 segundos del líder.


Landa: ´Me da confianza, sé que estoy en el buen camino´

Landa recobra la sonrisa en la Coppi e Bartali. El alavés de Movistar Team pone fin a un año pleno de infortunios desde su triunfo de etapa en la Tirreno 2018 con actitud ofensiva y éxito en la dura segunda jornada de la Settimana Coppi e Bartali, donde se ubica 4º en la general

Solo cinco días después de su regreso a la competición después de una lesión de casi dos meses producida en su debut 2019 en la Challenge de Mallorca, Mikel Landa ha ofrecido una maravillosa sorpresa a Movistar Team retomando la senda del triunfo en la Settimana Coppi e Bartali, más de un año después de alzar los brazos por primera vez de 'azul'.

El alavés, bien respaldado por sus compañeros en una breve pero durísima etapa de 140 km con cinco ascensiones puntuables, demarró, tras un intento previo de Rubén Fernández, en las rampas del decisivo Monte Tiffi (4,5 km al 75%), llevándose consigo a Lucas Hamilton (MTS), compañero del entonces líder de la prueba Robert Stannard. Los casi 40" con los que coronó el ciclista zuyano el ascenso sirvieron, pese al empuje final del pelotón y de contraatacantes como Shalunov (GAZ), para que Mikel se jugase -y obtuviese- el triunfo en un ligero repecho final, con loseta incluida.

Landa brinda así el sexto éxito masculino de 2019 a los hombres de Eusebio Unzué y se sitúa además 4º en una clasificación general a la que restan todavía dos días importantes por cubrir, sendas jornadas de media montaña el viernes (Forlí) y domingo (Sassuolo).

DECLARACIONES / Mikel Landa:

"Desde el último puerto hasta meta me veía bien, estaba tranquilo porque detrás venían bastantes compañeros. Así que confiaba en que podíamos llegar, lo único que quería era tener la oportunidad de disputar la etapa. He superado lesiones muy graves –la última en la Challenge de Mallorca con fractura de clavícula, el pasado mes de enero- y cuesta mucho volver. El año pasado acabé la temporada igual y empezar otra vez así ha sido complicado. Ahora, gracias a esta victoria todo es más llevadero y me da confianza, sé que estoy en el buen camino y a tiempo de hacer un buen Giro. Max y los directores confían más en mí que yo en mí mismo. Ven que entreno bien, pero el ciclista siempre tiene un poco de miedo al pelotón. Desde el comienzo de esta carrera me ha apoyado, ha organizado el equipo a mi alrededor y ahora estamos disfrutando todos".

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