John Degenkolb (Trek Segafredo) ha ganado la batalla del pavé, la novena etapa del Tour de Francia 2018: Arras Citadelle – Roubaix, de 156,5 kilómetros en la que nuevamente las caídas han sido protagonistas, esta vez junto a las averías. Una jornada épica, pero extraña en una gran vuelta.

En los primeros kilómetros de etapa, antes del kilómetro 10, se ha registrado una montonera en el pelotón en la que los más perjudicados han sido, de inmediato, el líder del BMC, Richie Porte, décimo clasificado en la general, y el murciano del Movistar, José Joaquín Rojas, que ya no han podido reanudar la carrera, con probables fracturas de clavícula.

Poco antes se había empezado a formar la escapada del día en la que finalmente se han metido diez corredores: Omar Fraile (Astana), Thomas De Gendt (Lotto-Soudal), Patrick Tolhoek (LottoNL-Jumbo), Jérôme Cousin, Damien Gaudin y Lilian Calmejane (Direct Energie), Chad Haga (Sunweb), Olivier Le Gac (Groupama-FDJ), Reinhardt Janse van Rensburg (Dimension), y Nicolas Edet (Cofidis).

Los diez han llegado al primero de los 15 tramos de pavé del día con 3:10 de ventaja y en el pelotón se ha producido el primer susto porque Romain Bardet (tercero el año pasado, segundo el anterior) ha pinchado y ha tenido que cambiar del rueda con un compañero y luego de bici con lo que ha perdido un minuto. Quedaban 105 kilómetros por delante. Se han quedado dos compañeros con él: Dillier y Latour.

El pelotón se lo ha tomado con tranquilidad entre los dos primeros tramos y Bardet se ha acercado hasta los 40 segundos, pero en cuanto han entrado en el pavé los Bora-hansgrohe de Sagan han vuelto a acelerar la marcha.

El francés del Ag2R ha logrado entrar en el grupo principal a 94 de meta, pero ha vuelto a parar para cambiar de bici y ha tenido que darse otro calentón. Sus compañeros le han vuelto a meter cuando faltaban 92 kilómetros , pero Bardet no terminaba de estar contento con su bici. Los diez tenían por entonces 3:45 de ventaja.

Más adelante se han registrado más caídas que han afectado a varios corredores importantes de la carrera, pero no de la general, pero el gran asunto se ha formado a falta de unos 65 kilómetros para meta, en el sector 11 donde los Sky le han liado. Se han puesto a tope con Kwiatkowski en cabeza del pelotón y la han liado. El pelotón se ha roto y se ha quedado por delante un grupo de menos de 25 unidades en el que no estaban algunos de los favoritos como Adam Yates, Van Garderen y Vincenzo Nibali, entre otros.

Luego ha habido reagrupamiento general. Quedaban 55 kilómetros para meta y por delante los supervivientes de la escapada seguían con 2:20.

Pero este no es terreno para los que no tienen costumbre y las caídas y averías han seguido marcando el discurrir de la carrera, dentro y fuera de los tramos de pavé. Se han caído todos los favoritos, o casi todos: Frrome (a 45), Landa (a 32), Gilbert (a 35), Urán (a 33)… y Bardet, que ha ido todo el día cruzado con su material.

Movistar team ha mandado parar a tres de sus corredores para ayudar a Landa, cuando Valverde, muy activo y siempre en cabeza, y Quintana iban por delante. Froome ha utilizado todos los recursos de su gran equipo; Urán ha hecho lo mismo, pero no le ha valido y ha perdido casi dos minutos.

De cara a meta, Degenkolb, Lampaert y Van Avermaet se hna logrado ir en un momento de despiste de Peter Sagan, cuando quedaban 14 kilómetros para meta. A 11 km Valverde ha intentado cogerles pero no ha podido y los tres se han jugado la victoria al sprint, en el que John Degenkolb ha conseguido su primera victoria en la Grande Bouclé, derrotando a Van Avermaet, que sigue líder, y al campeón de Bélgica.

El análisis hay que hacerlo al final, cuando se sepan las diferencias entre todos los favoritos

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