En boca de todos, Igor Antón acepta esa etiqueta de favorito en la Vuelta a España y que el podio, como mínimo, debe ser su objetivo especialmente después de su dominio el año pasado hasta su caída camino de Peña Cabarga cuando era líder y había ganado dos etapas. El líder del Euskaltel-Euskadi llega a la ronda española en plena madurez deportiva y con bastante más experiencia cuando en 2006 venció en Cerler con 23 años.

Cinco temporadas después, es un escalador consolidado como demostró en el Zoncolan durante el Giro de Italia, y sólo pide no tener mala suerte para dar el salto definitivo y dejar atrás su grave caída en El Cordal en 2008, de la que le costó recuperarse físicamente, y la de 2010 cuando todos le veían de rojo en Madrid. El ciclista vasco responde a las preguntas de BiciCiclismo.

¿Cuál es tu objetivo en la línea de salida de Benidorm?
Hay que luchar por todo, más tras el resultado de 2010. Pero hay que tener en cuenta que ni siquiera he ganado una vuelta pequeña. El podio sería algo bonito, sin descartar nada.

¿En qué estado de forma llega?
Se trata de llegar con ganas y descansado y durante la Vuelta coger un punto más. Tras la Vuelta a Burgos he realizado dos entrenamientos más de calidad porque los deberes estaban ya hechos, poco más se podía hacer.
A Burgos acudí como todos los años, a por las mismas sensaciones de 2010 cuando tuve una Vuelta perfecta hasta la caída. En Lagunas de Neila me hubiera gustado estar un poco mejor, pero en líneas generales las sensaciones fueron buenas.

¿Esperas poner fin a la mala suerte en la Vuelta?
Me han puesto ese sanbenito y la verdad es que me he caído pocas veces aunque con mala suerte porque han sido golpes fuertes. En la Vuelta espero tener buenas sensaciones y no tener mala suerte; lo prefiero a tener buena suerte. Está olvidado; para mí fue importante el Giro porque gané en otra Gran Vuelta. Más que quitar presión, me da confianza. De hecho, el Cordal o Peña Cabarga buscaré más energía y dar un punto más.

Todos te señalas, ¿no temes que dejen la responsabilidad de la carrera al Euskaltel-Euskadi?
Depende las circunstancias, del equipo que gane la contrarreloj por equipos, quién sea líder… Esperemos tener ayuda a la hora de tomar las riendas de la carrera. En las cronos por equipos la racha no es muy buena, Hemos tenido buenos resultados, incluso fuimos segundos en una Vuelta… Depende de pequeños detalles, aunque las diferencias no serán muy grandes.

¿Cuándo crees que se decidirá la carrera?
En Sierra Nevada conoceremos quiénes están para disputar. La carrera se decidirá en las etapas de Asturias y Galicia, y antes está la Covatilla; sobre todo La Farrapona y Anglirú son exigentes, y también la etapa de Ancares y el final en Peña Cabarga. Y una crono tan larga me perjudica.

Y hay llegadas que te pueden favorecer.
El Escorial y Valdepeñas –ya ganó el año pasado- son finales explosivos. La colocación será clave. Son finales bonitos para el espectáculo, pero sin importancia cara la general. Tengo más respeto a la crono individual. He mejorado, pero tengo que estar muy concentrado. Sé que voy a ceder y si no tienes un buen día puedes perder mucho tiempo.

¿Qué piensas de la recta final en Cantabria y el País Vasco?
Puede haber movimientos pero pienso que la Vuelta estará sentenciada y el equipo del líder controlará. Puedo haber algún intento de última hora, pero pienso que todo estará definido.

¿A quiénes consideras tus máximos rivales?
Destacaría a Menchov, que ya ha ganado dos Vueltas y un Giro, el Geox llega fresco pues no ha disputado el Tour. El RadioShack, con Brajkovic y Kloden, el Liquigas cono Nibali y Sagan; y Purito seguro que da batalla como siempre.

¿Y después de la Vuelta?
El Tour de Beijing está en el calendario, me hace ilusión correr en otro continente y espero llegar con los deberes hechos. (Risas)

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